En 1992, David Lynch estaba en la cúspide del éxito, un cineasta minoritario que se había convertido en un fenómeno de masas gracias a su serie "Twin Peaks" junto al cineasta Mark Frost y que revolucionó y cambio el medio televisivo con un serial que fusionó todos los géneros habidos y por haber bajo la excusa del asesinato de una joven en un pueblo ficticio del noroeste americano llamado Twin Peaks. El serial que duró únicamente dos temporadas, cambió las reglas establecidas por las convencionales series televisivas, abriendo el camino a producciones más inteligentes y de mayor envergadura, creando una psicosis colectiva gracias a la pregunta "¿Quién mató a Laura Palmer?" que tuvo en vilo a la audiencia. Una vez descubierto el misterio y debido a la implicación de Lynch en otros proyectos (el rodaje de Corazón Salvaje), provocó que la serie perdiera el rumbo por culpa de realizadores y guionistas que no entendieron el concepto creado por Lynch, hasta que este, volvió en el último episodio del serial para cerrarlo de manera precipitada (la serie estaba ya cancelada) pero magistral, con un episodio que más que resolver enigmas, abrió muchos más.
Del cielo al infierno
Aparte de Twin Peaks, Lynch había ganado en 1990 la prestigiosa Palma de Oro en Cannes, gracias a su película "Corazón Salvaje", una road movie trepidante,que se inspiraba de manera tangencial en "El Mago de Oz", y cuyo premio en Cannes fue objeto de polémica debido a sus amores y odios.
Por lo que su llegada en 1992 con su largometraje de Twin Peaks, que en su origen iba a llamarse "Twin Peaks: Fuego Camina Conmigo. Los Siete Últimos Días de Laura Palmer y Teresa Banks", era esperado con los cuchillos bien afilados por una crítica y unos seguidores que no perdonaban que su otrora genio independiente y fuera de los circuitos de Hollywood, disfrutara de las mieles del éxito y un respaldo popular ciertamente llamativo.
Nadie esperaba la bomba que Lynch llevaba debajo del brazo. La película fue abucheada y pateada en su premiere en el festival de Cannes, una reacción tan enfervorecida como la previa anterior a su estreno, donde crítica y público en busca de una butaca libre, eran capaces de vender su alma. La rueda de prensa posterior a la proyección del largometraje no fue precisamente un camino de rosas para Lynch, la cual recuerda el autor como uno de los peores momentos de toda su carrera.
Una película a contracorriente
La exagerada reacción negativa hacia el largometraje fue debida a algo muy simple: las expectativas. Unas expectativas que Lynch tiró por la borda, dejando pasmados y con la boca abierta a unos aficionados a su serial y no a su obra, y a unos cinéfilos modernillos que solo conocían al autor por su anterior y exitosa película, la menos exigente y muy pop "Corazón Salvaje" una obra mucho más facilmente digerible que este Twin Peaks fílmico, que devuelve al Lynch más sombrío y hermético de "Cabeza Borradora" y que sirve de prólogo y pie a su trilogía más abstracta y compleja, formada por "Carretera Perdida", "Mulholland Drive" e "Inland Empire".
Ya desde sus primeros minutos, Lynch juega al despiste y a romper expectativas, en unos créditos que sirven como preámbulo del discurso de Lynch a lo largo de todo el filme. La nieve estática de un televisor sirve como escenario de unos créditos bajo el lánguido y magistral tema principal de la película compuesto por Angelo Badalamenti. Esa calma y apaciguamiento queda rota al terminar los créditos por el estallido del televisor provocado por un hacha y el ensordecedor y terrorífico grito de una mujer asesinada en off. Lynch lo ha dicho todo. Esto no es la serie televisiva que todos queréis y amáis. Esto es una película y no tengo porqué censurarme.
Dos películas en una
La primera media hora de la película nos retrotrae a un caso criminal que se mencionaba pero no se desarrollaba en la serie en su episodio piloto y al que no se le daba más importancia que el hecho de que el crimen de Teresa Banks seguía el mismo modus operandi que el ocurrido a Laura Palmer. En esta media hora, Lynch nos descubre un Twin Peaks en negativo a través de varios aspectos. El primero, el nuevo agente del FBI, Chester Desmond, interpretado por el cantante Chris Isaak, el cual ya había colaborado con varios temas de su propia cosecha en la banda sonora de "Corazón Salvaje" y que aquí interpreta a un agente que es el reverso negativo del jovial, amigable y carismático Agente Cooper. Desmond, junto al agente Stanley interpretado por un sorprendente Kiefer Shuterland en un papel completamente diferente al que nos tiene acostumbrados y que aquí es un sosias del Henry Spencer de "Cabeza Borradora", una mente privilegiada con escasas habilidades sociales.
Pero el reverso negativo no se queda ahí. Mientras en Twin Peaks la serie, tenemos un cadáver bello y glamouroso como es el de Laura Palmer, cuyo rostro y cuerpo está en paz, aquí tenemos el cuerpo rígido y desencajado de Teresa Banks, y si la autopsia de Laura Palmer era realizada en un entorno frío y aséptico, aquí la autopsia es realizada en un almacén sórdido e insalubre. La policía de Deer Meadow, el pueblo donde aparece muerta Teresa Banks, es hostil y desagradable sirviendo como espejo en negativo de los entrañables y serviciales Sheriff Truman, el agente Andy Brennan y la secretaria Lucy. Y si el espectador de la serie añoraba el café Doble R, sus bellas camareras, y su delicioso café y tartas de cerezas, en Deer Meadow, tenemos su contrapartida con una dueña de la cafetería vulgar y una comida deleznable.
Lynch junta los misterios del serial y la enigmática frase del Hombre de Otro Lugar, "Let's Rock" con el destino del agente Desmond lo que hace que el agente Cooper tenga que hacer acto de presencia en la localidad, aunque previamente seamos testigos de la que quizá es una de las mejores escenas del largometraje, que transcurre en las oficinas del FBI y que tiene como protagonistas a Gordon Cole, Cooper, el cascarrabias Agente Rosenfeld y el agente Philip Jefries, viajero temporal perteneciente a una subtrama que fue mutilada en el montaje final de un filme cuyo montaje original traspasaba las cinco horas de metraje y que nunca ha visto la luz. En esta escena, donde Lynch da rienda suelta a todo su ingenio, somos testigos de un acontecimiento que hace que esta película no pueda considerarse una precuela de la serie, sino también una secuela de la misma, en el momento que el personaje interpretado por David Bowie señala inquisitivamente al agente Cooper y pregunta al resto de la sala si saben quién es realmente el que está ahí con ellos. El seguidor del serial sabrá que Cooper era poseído por la entidad maligna Bob en el final de la serie, haciendo que esa escena provoque un escalofrío a sus seguidores, por lo revelador del asunto.
Finalizada esta primera parte o prólogo de la película, y tras un monólogo de Cooper a su fiel Diane, la película cambia de tercio y de tono con el reconocible paisaje de Twin Peaks, que aparecían en los créditos de la serie y los queridos acordes del tema principal de la misma. El público respira aliviado. Tras media hora de personajes desconocidos, ambientes sucios y deprimentes y un tono que en nada recordaba al serial, volvíamos a terrenos familiares y conocidos. Craso error.
Caída y Redención de Laura Palmer: Un oscuro relato del horror de la pérdida de la inocencia y el incesto
Lo primero que vemos al entrar de nuevo al mundo de Twin Peaks, es un travelling de Laura Palmer, andando por un vecindario de ensueño, de irrealidad, donde todo es felicidad y alegría, se reune con su mejor amiga, Donna Hayward (interpretada en el filme por la actriz Moira Kelly, debido a que la interprete original Lara Flynn Boyle, se negó a aparecer en la película) y son piropeadas por sus novios oficiales Bobby y Mike. Pero poco después veremos que no es oro todo lo que reluce en la artificialmente inocente e inofensiva población de Twin Peaks.
En seguida empezamos a ver quién es realmente Laura Palmer, conocida anteriormente en la serie por el espectador, por los recuerdos, ensoñaciones y nostalgia de todos aquellos que la conocieron y la amaron antes de su muerte. Ahora la tenemos delante de nuestras narices, en carne y hueso, ya no es la imagen que nos perseguía a lo largo de la serie, ese fantasma que lo inundaba todo, sino que conoceremos de primera mano y en primera persona el vía crucis personal de una adolescente de 17 años de la que sabemos su trágico final, lo que hace aún más difícil el no sufrir al verla abocada a la muerte.
Sheryl Lee, la actriz responsable de la interpretación de Laura, realiza una tour de force absolutamente soberbia, injustamente ignorada por los certámenes, que pasa por todos los estados emocionales por los que puede pasar un ser humano, sabiendo transmitir al espectador a esa Laura Palmer repleta de dobleces, capas y múltiples personalidades, desde la mujer fatal y despiadada, a la joven irresponsable y alocada, hasta la niña desolada y aislada en un mundo rodeada de gente a la que no puede contar su terrible secreto y que queda perfectamente de manifiesto en una de las escenas finales del largo, cuando Laura llora desconsoladamente en su aula, el día antes de su muerte predestinada, mientras el resto de sus compañeros y profesores la ignoran o parecen no darse cuenta de lo que hay tras ese rostro triste y desencajado.
Y su terrible secreto es el haber sido abusada sexualmente por una supuesta entidad maligna llamada Bob desde los 12 años que ha poseído a su padre Leland. Digo supuesta, porque aunque en la serie televisiva el componente fantástico era grande y servía como excusa para esquivar el tema del incesto, algo que seguramente habría encendido las alarmas de censura tanto de la sociedad como de la cadena, aquí, la visión que tenemos de Leland, interpretado de manera aterradora por un excepcional Ray Wise, cambia todo lo que creemos acerca del personaje, dándonos a entender que Bob es una careta de Leland para realizar las atrocidades que comete y no al contrario, como nos hacía entender la serie, en una despiada crítica y aviso de la terrorífica situación que acontece en muchos hogares, con escenas tan reveladoras y escalofríantes como la cena entre Laura, Leland y su madre Sarah, reflejo de una mujer que sabe que algo no funciona en su casa y que teme a su marido, pero que no se atreve a desafiarle, costándole la vida a su hija. Esta idea aumenta, tras ver los siguientes filmes del realizador, "Carretera Perdida"y "Mulholland Drive" donde los personajes protagonizados por Bill Pullman y Naomi Watts en sus respectivas obras, se desdoblan en reflejos distorsionados y mejorados de si mismos, para no afrontar los atroces actos que cometen en nombre de un supuesto amor. Unos personajes que vistos en perspectiva son derivados de este Leland Palmer escindido entre el amor paternal por su hija y las pulsiones sexuales mal dirigidas y reprimidas que le llevan a abusar de su propia hija y acostarse con prostitutas que luego le chantajean (Teresa Banks) y que se parecen enfermizamente a su hija Laura.
Esto no quita para que el elemento fantástico desaparezca, porque la especialidad de Lynch, su marca de la casa y que es lo que a sus seguidores nos apasiona, es que todo es cierto y a la vez no lo es, es decir, el espectador puede y debe quedarse con la interpretación que más le guste, le interese o le parezca más lógica, dentro de las innumerables pistas de un puzzle apasionante que nos ofrece Lynch . En la película vuelve la habitación roja, el enano y el manco (revelándonos su asociación y parentesco), seres que parece ser viajan a través de la electricidad y que siempre han estado, están y estarán, provenientes de un lugar en el que las normas espacio-temporales no existen, en un universo, el de la Logia Negra y el del propio pueblo de Twin Peaks, donde el tiempo en vez de discurrir en línea recta, está superpuesto, sin saber realmente donde comienzan y acaban las cosas, una cinta de Mobius, una espiral infinita que serviría también como punto de partida de lo que sería la siguiente y mejor obra de toda la filmografía de David Lynch, "Carretera Perdida".
Porque lo que hace diferente a este traslado de Twin Peaks a la pantalla grande es esa extraña cualidad de precuela-secuela que tiene este proyecto. La película nos está contando lo que ocurrió antes de la muerte de Laura Palmer y la posterior aparición del agente Cooper en el pueblo y las vidas de Twin Peaks. Pero secuencias como la anteriormente mencionada de David Bowie, o el sueño en bucle infinito de Laura Palmer donde Cooper se le aparece dentro del sueño desde la Logia Negra y le avisa de una serie de acontecimientos que ocurrirán posteriormente en el serial y la aparición de la novia ensangrentada de Cooper, Annie, cuyo destino quedaba en suspense tras el final de la serie, adelanta acontecimientos del futuro y cierra enigmas que quedaron abiertos en el precipitado final del serial, que junto al epílogo- tras la aterradora representación del asesinato de Laura Palmer, que es aún más escalofriante de lo que sus seguidores habíamos imaginado y soñado-dan una conclusión a los personajes de Laura Palmer y Cooper, en un final que da un cierto halo de esperanza y luz tras más de dos horas de un filme que te vapulea emocionalmente, que te deja exhausto tras su proyección, pero que satisface a todos los aficionados con mente abierta de la serie y a los verdaderos seguidores del genial director. Una de las mejores obras de Lynch, a la par con sus obras maestras "Carretera Perdida" y "Mulholland Drive" y el puente hacia la etapa más original, emocionante y arriesgada de la carrera de este inclasificable artista nacido en Missoula.
Porque lo que hace diferente a este traslado de Twin Peaks a la pantalla grande es esa extraña cualidad de precuela-secuela que tiene este proyecto. La película nos está contando lo que ocurrió antes de la muerte de Laura Palmer y la posterior aparición del agente Cooper en el pueblo y las vidas de Twin Peaks. Pero secuencias como la anteriormente mencionada de David Bowie, o el sueño en bucle infinito de Laura Palmer donde Cooper se le aparece dentro del sueño desde la Logia Negra y le avisa de una serie de acontecimientos que ocurrirán posteriormente en el serial y la aparición de la novia ensangrentada de Cooper, Annie, cuyo destino quedaba en suspense tras el final de la serie, adelanta acontecimientos del futuro y cierra enigmas que quedaron abiertos en el precipitado final del serial, que junto al epílogo- tras la aterradora representación del asesinato de Laura Palmer, que es aún más escalofriante de lo que sus seguidores habíamos imaginado y soñado-dan una conclusión a los personajes de Laura Palmer y Cooper, en un final que da un cierto halo de esperanza y luz tras más de dos horas de un filme que te vapulea emocionalmente, que te deja exhausto tras su proyección, pero que satisface a todos los aficionados con mente abierta de la serie y a los verdaderos seguidores del genial director. Una de las mejores obras de Lynch, a la par con sus obras maestras "Carretera Perdida" y "Mulholland Drive" y el puente hacia la etapa más original, emocionante y arriesgada de la carrera de este inclasificable artista nacido en Missoula.
Gran reseña! Enhorabuena!
ResponderEliminarComo fan de Lynch que soy, disfruté enormemente de esta película cuando por fin se editó en DVD. Un film estupendo, puro Lynch. Sobre todo, con la terrorífica segunda parte... alucinante.
Gracias Mikel! Me alegro que te haya gustado. Es que le tengo un cariño muy especial a esta película que ha sido tratada tan injustamente. Como tu dices es Lynch en estado puro.
ResponderEliminarGracias por escribir!!!!
de los mejores post que has escrito! si es que Lynch te inspira!!!! :D
ResponderEliminarExcelente!
ResponderEliminarBuenas! acabo de terminar de ver la serie y la película, y al buscar opiniones me he encontrado con tu crítica y tras leerla solo decirte estoy encantado con ella. Coincido en todos los puntos, y la verdad me gustaría poder leer mas, tus conjeturas sobre la serie ¿tienes algún otro post donde trates la trama de la serie, o tus impresiones? Por ahi he leído que la peli va a reeditarse con extras, no se si llegarán a incluir todo el metraje perdido pero será interesante ver que escenas extras hay... a ver si se explica algo mas... un saludo!
ResponderEliminarMe alegro que te haya gustado. Y sobre todo que te haya gustado tanto la serie como la película, una de mis favoritas de David Lynch. Y no, todavía no he hecho una reseña o comentario acerca de la serie, pero me has dado una buena idea para un próximo saludo. Sobre Lynch, tienes un artículo sobre Carretera Perdida, mi película favorita del director, por si te quieres adentrar más en la obra de mi director favorito. En cuanto a la nueva edición en Bluray de la película, este año va a salir algo mejor, una edición con la serie completa y restaurada, repleta de extras inéditos y la película, más todas lo gran parte de las escenas eliminadas que son unas 3 horas más de metraje, restauradas y supervisadas por el propio Lynch. Pero si no puedes esperar, el guión original de la película está circulando por internet. Lo he leído y sobre todo las escenas descartadas están centradas en personajes de la serie que no entraron en el montaje final del film. Además de profundizar en el misterioso personaje interpretado por Bowie.
ResponderEliminarMuchas gracias por escribir!!
Gracias a tí. Intentaré ver Carretera Perdida, a ver que tal está. Pues si lo que dices de la nueva edición de Twin Peaks se cumple, vamos a tener mucho de lo que hablar! Espero que no quede solo en una espectativa, cuando esté en mis manos ya hablaremos!! un saludo.
ResponderEliminarAcabo de revisionar la serie en la Edition Deluxe del 2014. Tenía una cuenta pendiente desde que perdí el hilo de ella a mediados de los 90. Es una pena el bache que se produce en el guión a partir de la muerte de Leland pero termina por todo lo alto. Qué gran serie. Impactante e imprescindible. Qué grande es Lynch. La serie de mi vida. Saludos y un café con mucho aroma.......
ResponderEliminar