Wonder Woman 2 de Brian Azzarello y Cliff Chiang
Este segundo número de la primera superheroína del cómic americano, demuestra que el buen sabor de boca que dejó el primer ejemplar no fue casualidad. Azzarello, apoyado por el inconmensurable trabajo gráfico de Cliff Chiang, avanza lento pero seguro en esta dura y a la vez más fiel aproximación a la mitología griega. En este ejemplar, conoceremos a las “hermanas” de Diana, Isla Paraíso y vislumbraremos que no todo es cierto en el conocido origen de la amazona.
Justice League 2 de Geoff Johns y Jim Lee.
Para todos aquellos que el primer número de la serie estrella de la nueva DC les supo a poco, este segundo ejemplar cumple las expectativas puestas en el equipo creativo de la colección. Un tebeo hecho por y para los fan boys, disfrutable sobre todo si tienes entre 10 y 13 años, donde nos encontramos con el espectacular enfrentamiento entre Batman y Superman, más la ayuda de Hal Jordan y la aparición de Barry Allen, Flash. Lee demuestra su saber hacer como dibujante de blockbusters y se aprecia una mayor soltura y confianza que en el número previo. Johns, al final del ejemplar y al estilo de los documentos falsos a los que nos tiene acostumbrados Bendis en Marvel, introduce a Wonder Woman en el universo de la Justice League, en una interesante conversación entre Steve Trevor y Amanda Waller.
Catwoman 2 de Judd Winick y Guillem March
Tras el controvertido y polémico final del número pasado (polémico para aquellos que se escandalizan con cualquier cosa), este segundo ejemplar continúa justo donde nos dejaron y somos testigos de la escena de sexo entre Batman y Catwoman y su conversación posterior. Winick continúa explotando el contenido sexual de los anteriormente pacatos héroes de papel, sabedor de lo fácilmente escandalizable que es la sociedad actual. Pero eso no quita para que nos encontremos al mejor Winnick, al de los tiempos de Green Arrow y sobre todo, que tenga como colaborador excepcional, al gran Guillem March que nos deleita con 20 páginas antológicas, cuidadas hasta el extremo y que a diferencia de muchos de sus compañeros de los nuevos 52, no baja ni un ápice su calidad del primer número al segundo.
All Star Western 2 de Justin Gray, Jimmy Palmiotti, Moritat y Jordi Bernet.
Mi gran sorpresa de la nueva DC llega a su número 2 dando un ligero paso atrás. No es que este número este mal, pero la historia principal de Jonah Hex se ralentiza y no es tan interesante como lo planteado en el primer número. También el dibujo de Moritat se resiente, seguramente porque el excelente autor no ha tenido los mismos tiempos de entrega para este segundo número que para el primero. Este número estrena complemento protagonizado por El Diablo, otro de los héroes del western de DC y que tuvo hace poco tiempo una miniserie guionizada por Azzarello, guionizado por los mismos autores de la historia principal y con dibujante de lujo, Jordi Bernet, que hace un buen trabajo, aunque ya no se encuentre en su mejor momento artístico y el color no le siente del todo bien a su estilo basado en los contrastes entre las luces y las sombras. La historia, nada del otro mundo, pero se deja leer.
I, Vampire 2 de Joshua Hale Fialkov y Andrea Sorrentino
Otra de las sorpresas agradables del mes pasado que flojea en su segundo mes. La serie no está mal, pero el ritmo es excesivamente lento en algunos pasajes del tebeo, y en cambio otros acontecimientos ocurren demasiado rápido. El trabajo de Sorrentino, deudor del de Jae Lee, abusa de la fotocomposición y de un estatismo excesivo en las expresiones y rostros de sus personajes. Habrá que leer algún ejemplar más de este Romeo y Julieta vampírico para dar un veredicto.
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